miércoles, 6 de junio de 2012

En ese pueblito de montaña y en un invierno muy crudo del mes de marzo, el varón tan esperado llegó. Debido a la precariedad de la vivienda,se enfermo de los bronquios. Con cuidados caseros hasta que llegara el médico de otro pueblo y trajera los medicamentos apropiados, trataron con lo que pudieron y tenían a su alcance, todo para que se curara.                                                                     (A la distancia uno se pone a pensar que nace y vive el que DIOS o el destino ya tiene elegido).                                                                          
La hermanita, con 18 meses mayor, le tenía muchos celos. Lo quería,pero su curiosidad era mirarle a los ojos porque veía otra nena en ellos, por lo que tenían que tener cuidado, para que no le metiera los dedos en los ojos.
El padre estaba tan feliz mirando su hijo que no reparaba que a medida que
pasaba el tiempo, su hija cada vez estaba mas celosa y se sentía menos querida.                                                                                                  
Para la madre era difícil cuidar de la mayor, que muchas veces tenía los pies helados debido a que se había orinado encima y las botitas estaban llenas de pis. Además de dedicarle el tiempo que necesitaba el bebe.La tarea de la niña era cuidar a su hermanito. No había mucho con que jugar, sino con nieve. Entonces traía de afuera bolas de nieve y las derretía en el fuego de la cocina a carbón, corriendo el riesgo de quemarse.                            
Como dicen, DIOS y los ángeles protegen a los niños. Reconozco que es verdad.

1 comentario:

  1. Cada vez me sorprendes más y mejor. El tipo de letra es bonito y letra grande que se lee muy bien. ¡Adelante! Un abrazo

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